Pensá un número del 1 al 10.
El culo te abrocho.
El culo te abrocho.
Parece una conjetura arriesgada, pero un 10% de
probabilidades es mucho. Mucho más que la quiniela. Muchísimo más que la fe,
donde los factores de influencia se multiplican y el número estimado de
participantes anda alrededor de los 6.000 millones. Ya sé que rezar y hacer el
bien te suma puntos, pero igual es un tiro muy largo. Sobre todo comparado con
otras circunstancias donde las variables son más acotadas.
Revolear una moneda por ejemplo. Ahí tenés 50 y 50, sin
embargo se lo considera puro azar. Si lo pensás un poco, está mucho más cerca
del método científico que decir oraciones y confesar pecados.
Pero ya sabemos que Dios, Alá, Buda, Mahoma y el Pastor
Giménez obran de manera misteriosa y a veces las cosas pasan.
Y una casualidad vale más que mil razones.